Algunas veces se me hace tarde para todo. No llego, no llego, se me hace tarde en el país de las maravillas. Algunas veces me cierran las ventanas y el supermercado y se me borran las páginas antes de poder imprimirlas. Esos días, como hoy, en los que llego tarde a las citas más deseadas, en los que el café no me llega a rozar los labios y las fotos me salen todas movidas, sólo la remota esperanza de haber escuchado su voz al otro lado del teléfono me riza las pestañas.
Escrito por Clarice a las 18 de Mayo 2004 a las 03:23 PM | TrackBackSigue la letra e la que se ha convertido por convenio en mi cancióm:
Nunca llego a la hora apropiada
o pronto o tarde cuando ya no queda nada
Oigo campanas y nunca me entero dónde
Son tus palabras en un río que se esconde...
(Celtas Cortos: Siempre Tarde)
Lo importante es llegar al fin y al cabo, pronto o tarde pero hacerlo alguna vez... cuando nos retrasamos en el camino posiblemente será porque estemos aprendiendo de eso que nos retiene y nos hacer retrasarnos.
Escrito por deca a las 18 de Mayo 2004 a las 05:34 PM
Mañana será otro día...
Lo importante nunca corre tanta prisa...:) Ante Todo Mucha Calma :)
Escrito por mOe:) a las 19 de Mayo 2004 a las 09:35 AMBffff.... No se si yo saco ese aspecto tan optimista de la canción... Me he sentido muchas veces reflejada por esa letra... Nunca llego a la hora apropiada, o pronto o tarde o cuando ya no queda nada... Creo que hace referencia a un sentimiento de soledad, de no encontrarte "a la hora" en ningún sitio... De ser distinto. Bueno, más que serlo, sentirte... Oigo campanas y nunca me entero dónde... No me han avisado. O yo siento que no me han avisado... Siento que me dejan de lado. "Oí tus palabras en el río que se esconde"... Y que no entiendo a nadie (ni nadie me entiende a mí). No me siento ubicada, pero a la vez sí... También creo que habla de esto Ismael Serrano, cuando dice "No digas que aquí hay silencio, podrás decir que no oyes..."
Bueno, que esta es una opinión muy subjetiva, y que depende del momento personal de cada uno que la escucha...
Que conste que me encanta, eh!