Me recuerdo sentada en el columpio y a mi abuelo detrás, empujándome. Más fuerte, abuelo, que llegue al cielo. Aquel vértigo dulce, el miedo a que las cadenas del columpio se hiciesen trizas y el deseo remoto de que aquello ocurriera para salir volando.
Escrito por Clarice a las 26 de Mayo 2004 a las 06:16 PM | TrackBack
Qué tiempos!!
Casi creiamos tocar el cielo...
Yo era más de tirar piedras y de aquel arco de barras del que te colgabas como un mono :)
Escrito por mOe:) a las 27 de Mayo 2004 a las 09:45 AM